A medida que el pueblo de Villa Ballester progresaba, nuevos pobladores decidían establecerse definitivamente en el lugar.
Estos flamantes vecinos pasaban a ser fieles usuarios del mas confiable medio de transporte de la época. Por lo tanto la cantidad de pasajeros iba en franco y sostenido aumento.
En respuesta, el Ferrocarril hacía lo imposible por respetar su característica mas destacada, el horario.
Llegó un momento en que la mayoría de las partidas de la formaciones en Villa Ballester con destino a Retiro, se realizaban por la plataforma contraria, por falta de tiempo material para respetar ese tan ansiado horario.
El problema tenía su origen en la existencia de una única boletería para asistir a tan importante cantidad de pasajeros que venían tanto del lado este, como del oeste de la Villa.
Aunque la peor parte le tocaba a los pasajeros que venían de Villa Hué y Villa Klein, que no tenían mas remedio que cambiar al andén ascendente para poder sacar su boleto.
Esta era una mas de las tantas causas que comprometían el horario fijado para las partidas de los trenes.
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| Solicitud de aprobación de plano para construcción de la boletería |
La solución que había encontrado el ingeniero Fernando Ramirez para que las formaciones salieran de ambos andenes sin retrasos, fue establecer una boletería en el andén descendente, y así lo hizo saber por nota en septiembre de 1910.
Una vez reunida la documentación por parte del Presidente de la Comisión Local del F.C.C.A. Dr. José Frías, la realización de la boletería de madera en la plataforma descendente fue aprobada y concluida en el mes de junio, para finalmente, ser librada al servicio público el día 9 de julio de 1911.
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| Boleto de Ferrocarril que data entre 1985 y 1991 |
Fuente: Museo Scalabrini Ortiz
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